El fossar (foso) de les Moreres, es una plaza construida sobre el cementerio menor perteneciente a la basílica de Santa Maria del Mar. Es un lugar consagrado a la memoria de los defensores de la ciudad de Barcelona durante la guerra de Sucesión, concretamente la batalla del 11 de septiembre de 1714 (hoy en día, el 11 de septiembre es la Diada nacional catalana), en la que Catalunya perdió todos sus derechos y libertades a manos de la dinastía borbónica. En esta plaza, actualmente, arde una antorcha donde hay inscritos los versos del poema de Serafí Pitarra, cuyo pebetero tiene la forma de una hoz, símbolo de la revuelta de los segadors (segadores) de 1714, que dan nombre al himno nacional catalán. El poema adquire relevancia a partir de 1886, primera diada de Catalunya, ensalzando aquellos que lucharon por las libertades: “Al fossar de les Moreres no s’enterra cap traïdor, fins perdent nostres banderes serà l’urna de l’honor” (En el fosal de las Moreras no se entierra a ningún traidor, hasta perdiendo nuestras banderas será la urna del honor). Esta plaza está construida con granito rojo traido de la antigua URSS, el mismo en el que está construido el mausoleo de Lenin. Está considerada un bien de interés nacional desde 1915.